José López Zamorano/Corresponsal Notimex
Washington, 24 de febrero.- El Departamento de Seguridad Interna (DHS) de Estados Unidos puso este viernes en marcha el proceso de licitación para la construcción del muro propuesto por el presidente Donald Trump para la frontera con México, con vistas a otorgar los primeros contratos en abril próximo.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) anunció en el sitio de internet de compras de gobierno “FedBizOpps,gov” que formalizará el 6 de marzo próximo el trámite para el diseño y construcción de “varias estructuras prototipo de pared para la frontera entre Estados Unidos y México”.
“La licitación será conducida en dos fases, la primera requerirá que los ofertantes presenten un concepto de sus prototipos para el 10 de marzo, que resultará en la evaluación y selección de los proyectos para el 20 de marzo de 2017”, precisó la notificación.
Para la segunda fase, los ofertantes seleccionados deberán enviar un presupuesto final con la obra propuesta para el 24 de marzo de 2017.
“Se contempla que para mediados de abril se otorguen múltiples contratos. Una opción para millas adicionales puede ser incluida en cada contrato”, precisó la notificación oficial de “pre-solicitud”.
El presidente Trump anunció la mañana de este viernes que iniciará la construcción de un “gran muro” en la frontera con México “mucho antes de lo previsto”, aunque no precisó fechas.
“Vamos a construir el muro, de hecho va a empezar pronto, mucho antes de lo previsto, mucho antes de lo previsto… mucho, mucho antes de lo previsto”, aseveró Trump.
“Vamos a recuperar el control de la frontera y vamos a construir el gran, gran muro”, agregó.
Durante una audiencia legislativa, el secretario de Seguridad Interna, John Kelly, expresó su expectativa de que la construcción del muro esté en marcha en un lapso de dos años, pero no descartó que se puedan construir de manera inmediata algunas porciones de barreras en las zonas más necesarias.
En la actualidad, Estados Unidos dispone de más de mil kilómetros de barreras físicas en su frontera sur y se están construyendo porciones adicionales en el área de San Diego, California, aún antes del inicio del nuevo gobierno.
Pero la construcción del muro requiere que el presupuesto sea aprobado por el Congreso estadunidense, sin que hasta el momento exista un trámite formal del proceso de solicitud de fondos.
La administración ha indicado que pedirá los fondos bajo un posible esquema de fondos de emergencia, y que después buscará sea reembolsado por México, a pesar de que el gobierno mexicano ha rechazado toda posibilidad de pagar el muro.
Aunque el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, se comprometió a aprobar el financiamiento para el muro en el Congreso, varios senadores republicanos de estados fronterizos como el senador John Cornyn de Texas, han puesto en duda la conveniencia del muro.
Otros republicanos han cuestionado el costo potencial de la obra, estimado en más de 21 mil millones de dólares.
Aunque los republicanos tienen mayoría en ambas cámaras, requieren apoyo demócrata para aprobar cualquier presupuesto en el Senado, donde el líder de la minoría, Charles Schumer, ha dicho que no apoyarán la erogación de recursos para un muro fronterizo.