Nicolás Gamboa
En la época medieval, muchos de los relatos que se contaban o escribían eran un medio para difamar a las mujeres con el propósito de mantenerlas sojuzgadas. Enedina, joven dispuesta a cambiar la historia, emprende una campaña para combatir todas esas mentiras y agravios en El Sendebar: la cruzada de una fémina ilustrada, el nuevo y divertido montaje del Carro de Comedias de Teatro UNAM, que volvió a abrir su remolque en el Centro Cultural Universitario (CCU) tras la larga pandemia.
La obra, que tuvo que esperar año y medio su estreno, está escrita y dirigida por Mariana Hartasánchez, la primera mujer en dirigir en el Carro de Comedias, proyecto de teatro al aire libre e itinerante con más de 20 años de existencia. Ella es egresada de las carreras de Lengua y Literaturas Hispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) y de Actuación en el Centro Universitario de Teatro (CUT).
Cuentos del siglo X
Sendebar es un libro de cuentos del siglo X que estaba destinado a alertar a los hombres sobre las jugarretas que acostumbran las mujeres. Enedina logra robarlo y se une a un grupo de comediantes para llevar a escena las historias y revelar al público las mentiras detrás de cada una de ellas. Así, confía, “las verdades ayudarán a que se abran los ojos de muchos hombres que odian sin razón a las mujeres”.
Los espectadores son trasladados a la época medieval gracias a los distintos elementos de la puesta en escena: el vestuario, música, combates de espadas y lenguaje antiguo de las narraciones del libro. El tono de farsa y las situaciones humorísticas que se desprenden de la representación de algunos de los cuentos contribuyen a transmitir el mensaje de la protagonista: “Utilizar los libros como armas para hacer pensar que las mujeres descritas son idénticas a las que viven fuera de las páginas es una trampa misógina”.
La memoria es uno de los temas principales de la obra, dijo Hartasánchez después del estreno, “la memoria de las mujeres que fueron acalladas”. Y esto lo relaciona con lo que ha ocurrido en estos meses de confinamiento y distanciamiento: “La memoria de lo que atravesamos, creo que nos dejará más fuertes para recuperar el teatro y la presencia. Creo que ahora vamos a valorar diez mil veces más el estar aquí todos juntos. Tenemos en la memoria muy reciente lo que implica no poder tocarnos, no poder escucharnos de viva voz y no poder compartir en estos espacios que nos permiten pensar en colectivo y tener reflexiones más nutridas”.
La directora dedicó la temporada de El Sendebar… a quienes han muerto de Covid-19. La puesta en escena tendrá más de 120 funciones gratuitas los fines de semana de lo que resta de 2021 y durante 2022, a las 11 horas en la Explanada de la Fuente del CCU, lugar habitual de presentaciones del Carro de Comedias. Hay 80 lugares separados entre sí para mantener la sana distancia. Por protocolo sanitario, es necesario el uso de cubrebocas.
El director de Teatro UNAM, Juan Meliá, agradeció a las personas que han seguido las actividades en línea de la dependencia en este año y medio y destacó que, con el regreso a los escenarios, se cumple el ofrecimiento que hicieron al público durante todo este tiempo. “Lo prometimos: volveríamos a estar juntos, y ya lo logramos”.
Integran el elenco las actrices Andrea Castañeda y Carolina Muñiz, egresadas de la Escuela Nacional de Arte Teatral; Mario Medina, del Colegio de Literatura Dramática y Teatro de la FFyL; Omar Betancourt y Zabdi Blanco, del CUT; Diego Montero, de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, y Thania Luna, de la Universidad de Occidente de Culiacán, Sinaloa.
En el equipo creativo participan: Pablo Vera, asistente de dirección; Mauricio Ascencio, escenografía; Giselle Sandiel, vestuario; Antonio Garduño, utilería; Raúl Zambrano, composición musical; Sergio Bátiz, dirección musical; Miguel Ángel Barrera, combate escénico; Anaid Bohor, productora residente, y Rebeca Bravo, coordinadora del Carro de Comedias.