La mayoría de los egresados universitarios enfrentan dos retos para ingresar al mundo laboral: la falta de oportunidades y el desconocimiento de las habilidades básicas para conducirse en una entrevista de trabajo. Más aún, algunos no saben cómo elaborar un currículum vitae, no tienen claro qué tipo de puesto solicitar ni qué empresas ofrecen empleo relacionado con su área de estudio.
“Para mí sí fue un golpe de realidad darme cuenta de que no estaba preparada para una entrevista, no estaba preparada incluso para los exámenes que te hacen”, reconoció Patricia Bernal, egresada de la Facultad de Ciencias de la UNAM, en la plática virtual La vida Después de la Fac.
En ese sentido, la actuaria ponderó la importancia del programa Vector Ciencias, iniciativa que desarrolla la Secretaría de Vinculación de la facultad, en donde asigna un mentor a los egresados o estudiantes de los últimos semestres para asesorarlos en la preparación y búsqueda de trabajo.
Añadió que “la mayoría de los jóvenes que salen no tienen la confianza en sí mismos para saber vender su conocimiento”, y llamó a ser realistas con las expectativas, con lo que tienen para ofrecer a las empresas y, con base en ello, solicitar las vacantes.
Desde proyectos muy sencillos en Excel a analista de riesgo en un banco en Bélgica
La universitaria dijo que luego de su primer tropiezo se preparó e inició su trayectoria laboral en el sector privado, en las empresas BBVA Bancomer y en la aseguradora Quálitas, donde sus funciones consistían en la elaboración de reportes y análisis estadísticos.
Continuó en el sector público en la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en el área de formulación de proyectos. De esos empleos concluyó que un actuario puede aportar una visón más técnica y concreta, detectar los puntos de riesgo en la planeación estratégica, revisar la rentabilidad y las proyecciones.
Actualmente, Patricia Bernal radica en Leuven, Bélgica, y trabaja como analista de riesgo en el área de seguros del Argenta Bank. Sobre su experiencia laboral en un país europeo comentó que se enfrentó con la necesidad de aprender los idiomas oficiales: holandés, alemán y francés, y a entender que a pesar de su título universitario para Bélgica ella no tenía estudios, por lo que tuvo que buscar las instancias educativas para revalidarlos.
En su opinión el mercado laboral en Bélgica es muy exigente, pero visualiza un área de oportunidad para los actuarios en el rubro de las aseguradoras, “los seguros son una economía fuerte en Europa”, destacó.
“Nunca me imaginé trabajar fuera de México. Me siento muy contenta y orgullosa de poner en Argenta a una mexicana que si bien no habla perfectamente holandés al menos sabe de qué hablan y sabe resolver las situaciones a las que se enfrenta en el trabajo”, añadió.
Por último, subrayó la necesidad de aprender idiomas y recomendó tener toda la información para escoger bien en donde postularse para un empleo, ya sea en México o en el extranjero. “Siempre hay que tener la mente abierta y estar preparados para todo, porque las oportunidades se presentan”.