Michel Olguín Lacunza / Hugo Cuenca Solís
Dos gatos están en la parte alta de unas escaleras. Uno mira hacia abajo y voltea hacia el otro y lo llama con la mirada. Cuando éste se asoma por las escaleras, el primero lo empuja con una de sus garras arañándole los testículos y cae por las escaleras. El autor de la travesura observa desde las alturas cómo ha caído su amigo.
¿Por qué lo hizo? ¿Los gatos son malos? Hay un mito de que los felinos son malos debido a que en las redes sociales circula una serie de videos en los que se observa a algunos felinos empujando a otros, lanzándose contra los humanos para morderlos o arañarlos, e incluso arrojando cosas de las repisas.
Los gatos no son malos, dice Fausto Reyes Delgado, director de Desarrollo Institucional y Comunicación del Hospital Veterinario UNAM-Banfield. De hecho, su comportamiento es lógico, y hay varias razones.
1.-Empujan y tiran cosas. El gato tira cosas, hace ruido y todo mundo llega corriendo a ver qué sucedió. En ocasiones tira las cosas muchas veces. Así, el felino llama la atención de su manada. Lo que está haciendo es llamar la atención e incluso lo hace porque está aburrido.
¿Cómo actuar en esos casos? Para corregirlo debemos ignorarlo. Por ejemplo, cuando el gato tire las cosas lo mejor es no salir corriendo para ver qué hizo. Más tarde llamémosle la atención para que quitarlo de donde está, pero por más que tire las cosas no le demostremos que captó nuestra atención. Entonces dejará de tirarlas.
Otro consejo es que debemos tener más tiempo de calidad con nuestra mascota y buscar juguetes que le agraden para que así gaste su energía.
También tiran las cosas porque en ocasiones son como los humanos y no están de humor. “A veces se levantan y dicen: no quiero que me vean porque me enojo. Agarro mi rumbo y no me importa quién esté enfrente. Que todos se hagan a un lado”.
2.- Cuando alguien pasa cerca y el gato lo rasguña con su garra: Los gatos son muy territoriales y sí una persona pasa muy cerca lo cazará como buen depredador que es. “Estás completamente en mi área, muévete”.
Cuando por las noches nos levantamos con la luz apagada y vamos a pasar muy cerca de nuestro gato, lo que tenemos que hacer es avisarle, porque el es un depredador y nos tirará zarpazos para luego echar a correr. En estas circunstancias, es mejor encender la luz. De esta forma le aviso que estoy levantado y así no seré su presa.
Si las conductas del gato son depredadoras y se sigue aventando a las piernas y muerde fuerte, ya sea jugando con él o al pasar, lo ideal es acudir con un etólogo para que nos ayude a mejorar el comportamiento de nuestra mascota.
3.- Cuando atacan por defender: En redes sociales circula un video que muestra a un niño en su triciclo y de pronto un perro lo ataca mordiéndolo ferozmente. A continuación llega un gato que ataca al can, defendiendo al niño y haciendo huir al perro.
Hay otro video muestra a un veterinario atiende a un perro Mientras lo sostienen con fuerza aúlla. Curioso, un gato se acerca a la mesa y observa al paciente. De repente ataca al veterinario, mordiéndolo varias veces en la pierna.
¿Qué pasó? Los gatos tienen un instinto de protección hacia quienes consideran de su manada o incluso desvalidos. Se trata de un instinto, porque la única especie que caza para por placer es el humano, concluyó el académico universitario.