Ana Luisa Pérez
Joseph Cooper y un grupo de científicos emprendieron un viaje a través de un agujero de gusano. Durante ese viaje espacial llegan al planeta Miller donde por cada hora pasan siete años en la Tierra. Seguramente el lector ha reconocido el argumento previamente mencionado de la película Interestelar. En mi caso, no he podido viajar al espacio para regresar y ver la diferencia de tiempo, sin embargo, empecé a escribir estas líneas a las 9:30 pm mientras intentaba entender las aproximaciones que algunos teóricos han hecho acerca de qué es el tiempo. He volteado a ver el reloj y marca las 10:28 pm. Para mí, esos 58 minutos se han sentido como los seis minutos que tardo en recorrer el túnel de la ciencia en la estación del metro la Raza.
Escena de Interestelar. Imagen: Warner BrosWarner Bros, Syncopy, Paramount Pictures, Legendary Pictures.
Si por alguna razón me duplicara y una de mis versiones emprendiera el mismo viaje que Cooper, al volver a la Tierra, ¿vería mis líneas terminadas o llegaría justo al momento del punto final?
Cuántos de nosotros no hemos escuchado la expresión “apúrate porque el tiempo vuela”. En determinadas situaciones pudiera parecer que, en efecto, el tiempo tiene velocidad. Por ejemplo, cuando se está esperando el día en que el concierto al que tanta emoción se tiene de ir, el tiempo parece pasar muy lento. Sin embargo, esperar a que se cumpla el mes para pagar algún servicio, el tiempo parece tomar atajo y llegar más rápido a su destino.
¿Vas a tiempo? Cuestión de perspectiva
Las situaciones previamente descritas pueden ser obvias para la mayoría de los seres humanos, la diversión causa más emoción que hacer pagos. A escalas astronómicas puede ser que el sentido común del paso del tiempo que percibimos en la cotidianidad no sea del todo útil. El Dr. Luis Aguilar del Instituto de Astronomía de la UNAM dice que, de acuerdo con la percepción de cada persona, es como se siente la velocidad del tiempo pese a que realmente no la tenga. “El tiempo es una sola dimensión y siempre avanzamos todos a la misma velocidad”, agrega. Asimismo, fuera de lo que conocemos dentro del planeta Tierra el tiempo si se ve afectado por algo más que una percepción.
Tren equivocado
Para entender, o por lo menos intentar, el tiempo, la analogía del tren ha sido empleada para explicar su curso. Ésta nos dice que todo el Universo es un tren avanzando en línea recta sobre unas vías, las cuales representan el tiempo. El tren es el espacio donde se tiene la libertad de moverse a donde uno desee siempre y cuando no se salga de éste, las vías que quedan atrás son el pasado, las próximas a recorrer el futuro y sobre las que va pasando el tren son el presente “aunque tú eres libre de moverte dentro del tren por donde quieras, no puedes cambiar la velocidad por la cual te mueves a lo largo de la vía porque esa está dada por el tren y todo lo que está en él se mueve a la misma velocidad (…) todo el Universo avanza a la misma velocidad del tiempo”, platica el Dr. Luis.
En 1905, Albert Einstein publicó la teoría de la relatividad especial, la cual describe la física del movimiento de los objetos en el espacio-tiempo, “Einstein nos hizo ver que en realidad la analogía del tren es errónea. Una analogía más correcta sería una autopista de muchos carriles y diferentes observadores que van en diferentes carros. Dependiendo en qué carro vaya el observador, algunos van más rápido y otros más lento. El tiempo no es absoluto, corre a velocidades diferentes y eso depende del movimiento del observador”
Pese a que se ha dicho que el tiempo no tiene velocidad, hay algo que si lo afecta. En 1915, Einstein publica la teoría de la relatividad general, la cual explica la discrepancia de tiempo en el planeta Miller y la Tierra en la película Interestelar.
Dentro de la relatividad general, cualquier masa (un libro, una persona, un árbol) produce curvatura en el espacio – tiempo, sin embargo, los objetos previamente mencionados no tienen la suficiente masa para que logremos ver los efectos de esa distorsión, aunque eso no significa que no haya efecto. Para ello se necesita algo más pesado que un tractor o el edificio más alto del mundo: “Para ver el efecto se necesitan objetos como un planeta, estrella o galaxia”, agrega.
Imagen: henning dalhoff/spl
“Los que llegan al planeta Miller están muy cerca de un agujero negro, por lo tanto para ellos el tiempo corre más lento que lo que corre en la Tierra” Sin embargo, esta perturbación no solo ocurre en la dimensión del tiempo sino en las tres del espacio: izquierda-derecha, frente-atrás, arriba-abajo, llamado distorsión del espacio-tiempo.
¿Qué pasaría con el espacio-tiempo si pudiéramos estar cerca de un fenómeno astronómico como la fusión de dos agujeros negros? Si el planeta Tierra estuviera lo suficientemente cerca de un objeto con tal masa que distorsiona el espacio-tiempo, ¿Cuáles serían los efectos observados? Para evitar crear un texto tan denso que distorsione el tiempo de lectura otorgado por el lector, dejaremos estas cuestiones para otro texto en un tiempo no muy lejano, lo cual dependerá, por supuesto, de la perspectiva con la que los lectores lo esperen.
