Por Julio César Fierro
Es oficial. A pesar de ser increíblemente impopular con los ciudadanos de la Unión Americana, el Viernes, 22 de Diciembre del 2017, Donald Trump firmó la mayor revisión del sistema tributario estadounidense desde 1986. Está reforma fiscal, también llamada “The Tax Cuts and Jobs Act” reescribe el código de impuestos en diferentes formas, y según los republicanos, esta ley se promulgó primordialmente con el objetivo de que haya un impulso al crecimiento económico del país y que la clase media crezca. No obstante, a pesar de que los republicanos tratan de vender esta reforma como la salvación de la clase media dentro de los Estados Unidos, ésta no tendrá un impacto positivo en la comunidad latina del país.
La reforma republicana de 1.5 trillones de dólares tendrá muy poco beneficio e impactará negativamente a los latinos en los siguientes puntos:
Recortes Tributarios
Empezando el 2018, la mayoría de estadounidenses tendrán recortes tributarios. Según, The Tax Policy Center, cuatro de cada cinco contribuyentes pueden esperar un recorte en su pagó de impuestos. Sin embargo, estas estadísticas pueden ser engañosas, ya que a pesar de que los recortes incrementarán el salario de los contribuyentes – estos no van a tener el mismo efecto en todos los ciudadanos. Los recortes tributarios para los ciudadanos de clase baja y media serán tan bajos que apenas los notarán, mientras que para los ciudadanos con mayores ingresos serán de gran beneficio.
The Tax Policy Center, después de analizar la reforma fiscal, señala que los contribuyentes con un salario menor a $25,000, tendrán un recorte promedio en sus impuestos de $60, o el 0.4 porciento después del impuesto. Los contribuyentes de la clase media con un salario de entre $49,000 y $86,000 recibirán en promedio un recorte de $900 o 1.6 porciento después del impuesto. Aquellos que ganen entre $86,000 y $149,000 verán en promedio un recorte de $1,800 o 1.9 porciento después del impuesto. Y los ciudadanos que tienen ganancias de $308,000 y $733,000 obtendrán un recorte aproximado a $13,500 o el 4.1 porciento después del impuesto. Mientras que aquellos con salarios arriba de los $733,000 recibirán en promedio un recorte de alrededor $51,000 o 3.4 porciento después del impuesto.
Al observar esta quintilla nos podemos dar cuenta que los ingresos de los contribuyentes latinos están por debajo de la clase media estadounidense, por lo cuál no se beneficiarán o ganarán casi nada de los recortes tributarios ofrecidos en esta nueva ley. Los latinos son el segundo grupo dentro de los Estados Unidos en tener el salario promedio más bajo, el año pasado tuvieron ingresos anuales en promedio de $47,675 y de acuerdo con organizaciones de defensa de los latinos, 11.7 millones de hogares latinos tienen ingresos inferiores a los 75 mil dólares al año.
Crédito fiscal por niño
A pesar de que con la nueva reforma el “crédito fiscal por niño” se vera doblado, hasta 2,000 dólares por cada hijo menor de 17 años, según voceros de la Casa Blanca. Los inmigrantes indocumentados que trabajan y pagan al fisco por medio de un número de identificación personal (ITIN por sus siglas en inglés) dejarán de tener acceso a este crédito si es que sus hijos no cuentan con un número de seguro social. Esto debido a que la nueva reforma indica que los niños que nacieron en el extranjero no podrán acceder a este crédito, ya que forzosamente necesitan contar con un número de seguro social para que sus padres puedan reclamar este beneficio.
Cabe destacar, que la reforma fiscal de los republicanos, también menciona que es obligación de las personas indocumentadas que trabajan paguen impuestos por medio de un número de identificación fiscal (ITIN).
Esto ya venía sucediendo desde hace más de dos décadas, aún sin que la ley lo hiciera mandato, el grueso de la población indocumentada para sus impuestos, dado que existe la creencia de que en el momento en que se pudiera regularizar su situación migratoria, podría ser de gran ayuda comprobar que han cumplido con esa obligación de cada trabajador de pagar sus impuestos anualmente.
Programas Sociales
Es bien sabido que los republicanos desde el inició del Afordable Care Act han buscado deshacerse de él, y con esta ley han empezado el proceso. Esta reforma, deroga en el 2019, el “mandato individual” del AFA, lo cuál significa que se eliminará la multa federal a las personas que no compren seguro de salud bajo esta ley. Esto creará a largo plazo que algunos miembros (principalmente personas de bajos recursos, millones de latinos entre ellos) pierdan su atención médica, paguen cuotas mas altas y de menor calidad.
Además, se proyecta que la reforma republicana cree un déficit de alrededor de 1.5 trillones de dólares en los próximos 10 años. Esté déficit ocasionará que haya menos dinero para programas sociales, como lo son: Medicare, Medicaid y Food Stamps, lo cuál causaría que muchos ciudadanos de bajos recursos, incluyendo familias latinas e hijos de indocumentados pierdan está ayuda.
Solamente Medicaid otorga con seguro de salud a 7.4 millones de latinos adultos (sin contar adultos de la tercera edad) y 12.2 millones de niños latinos, excluyendo a personas discapacitadas.
A pesar de que los republicanos quieren crear la idea de que esta reforma fue creada para ayudar a crecer y fortalecer a la clase media del país por medio de recortes tributarios, está no ayudará a que las familias latinas se beneficien y salgan de la pobreza.
De hecho, una de las principales críticas a estos cambios en el pago de impuestos, es que beneficiarán a quienes tienen más dinero, y quienes menos necesitan del apoyo del gobierno.
Desde luego los latinos estarán peor bajo esta nueva ley, ya que esta reforma hará que muchos de los programas y beneficios gubernamentales que realmente brindan un apoyo y asistencia a las familias latinas desaparezcan o se paguen más por ellos.
